REFLEXIONES EN LA ARENA LXX (27-V-2011)

        ELECCCIONES 2011: SORPRESAS Y DECEPCIONES EN LOS REALEJOS.

        Pasaron las elecciones y dejaron un reguero de sorpresas y decepciones que a la inmensa mayoría de la población e, incluso, de los políticos dejó con la boca abierta. Los resultados han dado un vuelco total a la política municipal; han confirmado el escoramiento a la derecha que comenzó, incluso, antes de las elecciones municipales de 2003, cuando acceden al gobierno municipal CC y PP. Antes de esas elecciones el PSOE ya había recibido varios avisos.

        El gran vencedor indiscutible fue el Partido Popular, liderado por Manolo Domínguez que a base de besos y apretones de manos ha conseguido que la derecha consiga su primera mayoría absoluta. Gana el PP las elecciones, aupado por la ofensiva popular para colocar a Rajoy en la presidencia del gobierno español. Ni los más optimistas del PP pensaron en obtener los más de 10.000 votos que le han reportado once concejales. El PP en ocho años ha quintuplicado sus votos, rentabilizando tanto su acción de gobierno como de oposición. El populismo y la demagogia han sido sus principales bazas, se han sentado en la puerta para ver pasar el cadáver de su vecino, CC.

        La inversión económica en la campaña la ha rentabilizado muy bien. Su programa electoral a todo color, con DVD incluido, promete una autentica revolución, aunque no sabemos de dónde van a sacar el dinero porque han descartado la subida de impuestos. Ahora viene lo realmente serio, “El cambio”, es decir, cumplir lo prometido: las infraestructuras, hipódromo y cuartelillos incluidos.

        La otra sorpresa vino por la izquierda, el regreso de Izquierda Unida Canaria al ayuntamiento tras cuatro años de ausencia. Digo sorpresa porque ante la polarización, ante la tendencia tripartidista de la sociedad canaria resulta esperanzador la presencia de otra voz, de otras ideas diferentes.

        IUC había perdido la representación que tenía desde 1987, veinte años de trabajo serio y coherente, de denuncia constante de especulación urbanística, de defensa de los servicios públicos, de las políticas sociales y de la participación ciudadana.

        La apuesta por la recuperación del espacio de la izquierda, recayó en Jonás Hernández, un joven veterano político, que ha liderado una candidatura donde se conjugada juventus y veteranía. Con pocos medios económicos y materiales, pero con mucho sacrificio e ilusión, IUC transmitió sus ideas con ingenio y con un mensaje positivo, “Abre los ojos”.

        Con cerca de 1200 votos, IUC recuperó su electorado tradicional desafiando al llamado voto útil, que a la larga siempre se ha convertido en el más inútil y, sobre todo, más injusto, pues el que lo recoge, el PSOE, lo devalúa, empleándolo en el desarrollo de políticas antisociales. La izquierda necesaria ha vuelto. Bienvenida sea.

        Entre los decepcionados, el Partido Socialista Obrero Español, obtuvo el peor resultado electoral de su historia. Poco más de 3000 votos y tres concejales suponen el “suelo electoral” de un partido que gobernó Los Realejos durante veinticuatro años, la mitad de ellos con mayorías absolutas. En muy pocas mesas electorales el PSOE superó el centenar de votos

        Miguel Ángel Regalado, encabezando una candidatura muy renovada, fue incapaz de atajar la sangría de votos que sufre el PSOE desde hace doce años. Los socialistas en ese tiempo han perdido dos tercios de su electorado. Quizá no merecía tanto castigo, por candidatos y programa, pero lo cierto es que en su momento, hace doce años, debió comenzar el relevo generacional que se ha hecho tarde y mal.

        La crisis económica, la política errática de Zapatero, le ha pasado factura, como lo hiciera también en la inmensa mayoría de municipios. Aquí, en Los Realejos, han pagado la parte alícuota de los errores de La Moncloa. Mucho tendrá que reflexionar el PSOE realejero para recuperar el espacio perdido.

        Pero la gran decepción vino de la mano del Coalición Canaria. Su descalabro ha sido mayúsculo, en ocho años ha dilapidado su victoria electoral de 2003. Su cartel electoral, Oswaldo Amaro, ha personalizado el fracaso de los nacionalistas con su intransigencia e inmovilismo, sobre todo, después de la ruptura del pacto con el PSOE, hace año y medio.

        Una pésima campaña electoral, con una preocupante desmovilización de la militancia y unas acciones puntuales volcaron a su electorado hacia el PP. Primero fue el plagio de “La Voz de Los Realejos”, creando gran confusión y rechazo entre los ciudadanos. Pretendieron  apoderarse de la acción municipal en beneficio propio. Pero la gota que colmó el vaso vino con el reparto de bolsas de comida con votos en las zonas de medianías, que consiguió el efecto contrario: el rechazo y el trasvase de votos hacia el PP.

Lo que hace años Julio Anguita calificó como el “voto cautivo” no funcionó. Los asesores de campaña de CC en Los Realejos se merecen algo más que un suspenso. La incógnita está en saber cuántos concejales electos de CC tomarán posesión el próximo sábado, 11 de junio.

En los municipios vecinos también hubieron sorpresas y decepciones. En el Puerto de la Cruz, el PSOE bajó considerablemente, en menor medida CC que podrá reeditar su pacto con el PP. La sorpresa vino con IUC que vuelve al ayuntamiento después de doce años de ausencia.

En La Orotava, casi todo sigue igual: con un Isaac Valencia imbatible y un PP que logra cuatro concejales. El PSOE es el que no termina de arrancar. La gran decepción, o mejor injusticia, se produjo con IUC que pierde su representación por cuatro votos. ¿Quién dijo que un voto no vale nada?

En San Juan de La Rambla, Manolo Reyes se puede quedar sin la alcaldía por una chuleta o un costillar. ¡Qué aproveche!